La terapia de reprocesamiento de trauma es un tipo de abordaje terapéutico que permite tratar y sanar los traumas que hemos vivido, principalmente durante nuestra infancia y de los que, a menudo, tenemos poca consciencia. Estas situaciones traumáticas no resueltas pueden generarnos dificultades importantes en nuestra vida presente: en las relaciones, en el ámbito laboral, en nuestra experiencia interna (cómo nos sentimos internamente), en la pareja, en la crianza, etc.

Se trata de un tipo de psicoterapia que, a través de las señales que nuestro propio organismo nos proporciona (sensaciones físicas, dolores, tensiones, bloqueos, pesadillas, despersonalización, ansiedad, desregulación emocional, dependencias, dificultad para vincularnos con los demás, etc.) consigue reconectarnos con esas heridas que quedaron desconectadas de nosotros para poder recuperar el equilibrio emocional y resolver los síntomas que estamos experimentando en el presente.

La experiencia de conectar con nuestras heridas (traumas) en el espacio terapéutico nos ofrece la posibilidad de solucionarlas y, de esta forma, solventar algunas de las dificultades que experimentamos en el presente. Además, este modelo de psicoterapia nos permite conocer y ahondar en nuestro propio sistema interno y reconocer aspectos de nosotros/as mismos/as y de nuestra personalidad.